Conviertete en quién quieres ser, primera parte.
2017-02-13

Vivimos en el momento presente.  Lo que somos es el resultado de las decisiones que hemos tomado y los pasos que hemos dado para lograr nuestras metas.  A veces hemos fallado, a veces hemos aprendido de nuestros errores e intentado de nuevo, otras veces hemos tenido éxito.  No importa.  Lo que somos hoy es la consecuencia de todo lo que ha sucedido antes.  Lo mismo es cierto acerca del futuro.  Seremos lo que construyamos con cada pensamiento, cada decisión y cada acto que hagamos, construimos a nuestro futuro yo.
En cualquier momento dado, hay muchos futuros potenciales para nosotros, y cada paso que damos tiende a fortificar más un futuro yo u otro.  Por ejemplo, si estoy decidiendo qué carrera voy a estudiar saliendo de la preparatoria, esa decisión tendrá un gran impacto en el yo del futuro, ya que me convertiré en un ingeniero, un médico, o quizá deje la universidad.  Hay decisiones que tienen más impacto que otras ya que conllevan mayores compromisos y nos amarran a cierto camino, fortaleciendo el futuro yo que proponen.  De esa manera, cuando decido casarme y tener una familia, estoy fortaleciendo al futuro yo que tiene hijos y tiene que hacer el rol de mamá, y todo lo que eso implica.  Si decido no casarme y hacer una carrera envés, estoy fortaleciendo al futuro yo que tiene carrera, éxito, abundancia material y probablemente muchas parejas románticas.  Hay otras decisiones que influyen menos en el futuro yo, como decidir si comer una ensalada o comerme el delicioso muffin de chispas de chocolate.  Sin embargo, afectarán a mi futuro yo en algún grado.  Cada pequeña decisión me acerca más a un diferente yo potencial en el futuro.